Siempre será lo más fácil ir a por los judíos - Douglas Murrey - Spectator

Hace poco más de una semana que un hombre armado abrió fuego contra el Museo Judío de Bruselas. Cuatro personas - incluidos dos turistas israelíes - fueron asesinados, los israelíes de un disparo en la cara y la garganta.

El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, dijo que inmediatamente después de esos asesinatos, y antes incluso de que se hubiera identificado a algún sospechoso:

"Este acto de asesinato es el resultado de la incitación constante contra los judíos y su estado. La calumnia y la mentira contra el Estado de Israel continúen siendo escuchadas en suelo europeo, incluso cuando se ignoran sistemáticamente los crímenes de lesa humanidad y los actos de asesinato que se perpetran en nuestra región. Nuestra respuesta a esta hipocresía es afirmar constantemente la verdad".

Parece que Netanyahu tenía toda la razón. Ahora, después de más de una docena de días, un hombre francés llamado Mehdi Nemmouche aparentemente ha reivindicado la autoría de los asesinatos y ha sido arrestado. De acuerdo con la policía francesa fue detenido con un Kalashnikov y una pistola similar a las utilizadas en el ataque. Mehdi Nemmouche es un ciudadano francés que parece haber regresado a Francia después de luchar por la 'yihad' en Siria. Si es declarado culpable de los delitos, Nemmouche sería el primera yihadista que después regresar de Siria ha participado en actos de terrorismo tras volver a casa.

El caso, obviamente, se ha desarrollado de esta manera, pero hay aún varias cuestiones que matizar.

En primer lugar, habrá quienes sostengan que Mehdi Nammouche es un hecho aislado. Pero no lo es. Vale la pena recordar, entre otras cosas, el caso de ese musulmán francés llamado Mohamed Merah, quien hace dos años provocó una serie de asesinatos en Toulouse dirigidos contra soldados franceses y una escuela judía.

Sin duda, también habrá aquellos que ahora digan que si Occidente hubiera intervenido en Siria hubiéramos sido capaces de evitar la "radicalización" de gente como Nemmouche. Esto es pura ignorancia. Siempre es bueno recordar que hay cierto tipo de juventud musulmana que afirmará que se ha radicalizado como consecuencia de la intervención de Occidente en alguna parte, o bien por la falta de intervención de Occidente en alguna parte. Por ejemplo, algunas personas pueden recordar el caso del distinguido graduado de la London School of Economics, Omar Sheikh, un ciudadano británico que afirmó que había sido radicalizado por la guerra en los Balcanes, entre otras cosas. Omar Sheikh, aparentemente, no se mostró satisfecho con la intervención de la OTAN a la hora de detener la masacre de los kosovares musulmanes. Tampoco por la intervención para proteger los lugares sagrados del Islam por los ejércitos de Saddam Hussein. En el 2002 Omar Sheikh secuestró y luego decapitó al periodista judío estadounidense Daniel Pearl.

Cualquier persona que aún dude del aspecto "anti-judío" como elemento central de la ideología de los extremistas islámicos también podría recordar el hecho de que los terroristas de Mumbai en 2008, así como los destinados a conseguir objetivos de alta visibilidad, como el Hotel Taj en Mumbai, no pudieron evitar entrar en el único y pequeño hogar religioso judío de Bombay, donde torturaron y asesinaron a un rabino y a su esposa, entre otros.

¿A qué se debe todo esto? La razón es bastante desagradable, pero resulta difícil negar su existencia en todo el mundo, incluso en Europa y en Gran Bretaña. Como un prominente periodista musulmán e izquierdista británico escribió el año pasado:

"Me duele tener que admitir esto, pero el antisemitismo no es sólo tolerado entre algunos sectores de la comunidad musulmana británica; es rutinario y habitual. Cualquier musulmán que lea este artículo - si son honestos con ellos mismos - sabrá al instante a lo que me estoy refiriendo. Es nuestro pequeño sucio secreto sucio"

En efecto. Y ese odio, que se imparte entre los musulmanes del Reino Unido y de toda Europa, forma parte importante de la razón por la cual un radical decide dar un paso más hacia matanza, en la cual los judíos siempre están en la parte superior de la lista de objetivos. Esta es la cuestión. Siempre será más fácil ir por los judíos.