Un Abbas desafiante pronuncia un nuevo discurso de los "tres noes" - Daniel Siryoti - Israel Hay

Los palestinos nunca reconocerán a Israel como un Estado judío, dijo el presidente de la Autoridad Palestina Mahmoud Abbas en un discurso en el complejo gubernamental de la Muqataa en Ramallah este sábado.

Abbas pronunció este discurso antes de su viaje previsto a París para la conferencia de la Liga Árabe, donde pedirá su apoyo ante la emergente acuerdo marco del secretario de Estado de EEUU de John Kerry.
El líder palestino añadió otros dos estipulaciones con respecto a un futuro acuerdo de paz en su discurso: No habrá ningún acuerdo a menos que el este de Jerusalén se convierta en la capital de un futuro Estado palestino y el derecho al retorno de los refugiados palestinos deberá quedar en manos de la decisión de los propios refugiados y de sus descendientes (se desentiende del asunto y lo deja pendiente de cada uno de ellos).

En un discurso que recuerda a la Resolución de Jartum de 1967, en la que la Liga Árabe declaró lo que hoy se conoce como los "tres noes" - no a una paz con Israel, no al reconocimiento de Israel y no a negociaciones con Israel -, Abbas declaró además que el Valle del Jordán será una parte integral de un estado palestino.

Abbas hizo estas declaraciones a pesar de que las negociaciones de paz en curso entre israelíes y palestinos están en una etapa delicada.

Mientras tanto, Kerry se reunió con los ministros de Exteriores de los países de la Liga Árabe el lunes, y les dijo que Washington estaba decidido a seguir adelante con el proceso de paz. Agregó que las conversaciones estaban en una etapa que requiere decisiones difíciles de Abbas y del primer ministro Benjamin Netanyahu, y pidió el apoyo de la Liga Árabe para las negociaciones de paz en curso.

El ministro de Asuntos Exteriores de la Autoridad Palestina, Riyad al-Maliki, afirma que los ministros de Exteriores de la Liga Árabe le dijeron a Kerry que se niegan a reconocer a Israel como Estado judío y ha añadido que también respaldan la postura palestina de rechazar cualquier propuesta que no incluya Jerusalén Este como capital de un futuro Estado palestino.