Thursday, January 10, 2013

El último artículo que insiste en que "los asentamientos no son el problema" - Barry Rubin



Debe ser cosa del Año Nuevo. El Washington Post tiene una editorial donde explica que los asentamientos israelíes no son el principal problema en el Oriente Medio. La publicación de este editorial resulta increíble, sobre todo porque tal grado de cordura resulta muy raro. Comienza así:
"Dos nociones erróneas, pero muy extendidas, respecto a la paz entre israelíes y palestinos son que los asentamientos son el principal obstáculo para un acuerdo y que la construcción adicional en ellos hará imposible un Estado palestino".
Y luego continúa mencionando unos datos muy detallados que vale la pena repetir:
- "Tras los acuerdos de Oslo de 1993, el gobierno del primer ministro Netanyahu, al igual que varios antes de él, limitó la construcción casi en su totalidad a las áreas que ambas partes esperan que Israel se anexiona tras los intercambios territoriales en un eventual acuerdo...
- “Casi todos los colonos judíos viven en un territorio que representa solamente el 4% de toda Cisjordania, precisamente el área que Israel trata de anexionarse como parte de un plan de paz que fue presentado por primera vez hace doce años”. 
- “La última construcción de Israel, la que conectará Maale Adumim - a pocos pasos de Jerusalén - con el resto de la ciudad (la E1), no supone la destrucción de cualquier posibilidad de paz tal como ha sido retratada en gran parte de los medios occidentales y de algunos gobiernos occidentales. En el peor escenario, si finalmente ese corredor acaba determinando la frontera definitiva entre los dos estados, los conductores palestinos tendrían que tomar un desvío de unos diez minutos”. 
- "Los que realmente están interesados ​​en avanzar hacia un Estado palestino... deberían presionar a [presidente de la Autoridad Palestina] Mahmud Abbas para que deje de usar los asentamientos como una excusa para la intransigencia  y para que enfríe su propia retórica recalentada".
Una de las preguntas que más a menudo me hacen es acerca de los asentamientos israelíes. Es ridículamente fácil de demostrar que no son el factor que impide la paz entre Israel y Palestina. Estoy a favor de un eventual desmantelamiento de casi todos ellos - pero sólo cuando haya una paz global que permita la anexión de algunos de ellos - que estuvieran en territorio de Palestina.
Pero es un largo camino por recorrer.

El problema con la demostración de que los asentamientos no son el problema es que es muy difícil conseguir que esos argumentos lleguen a una gran audiencia en Occidente. Muchas personas también tienen una imagen pre-1993 de la situación en sus mentes. En pocas palabras, hay dos puntos que determinan esta falsa visión: El primero muestra que las afirmaciones acerca de los asentamientos son contrarias a los hechos, el segundo que son contrarias a la lógica.
  • Primer punto: el día después del acuerdo firmado en 1993 entre Israel y la OLP, el entonces primer ministro Yitzhak Rabin dejó en claro que la interpretación formal de Israel era que permitía la construcción continua en los asentamientos existentes. La Autoridad Palestina no se opuso, y ese tema no impidió la negociación en los próximos siete años.
Existen también a menudo interpretaciones falsas de los hechos - ¿deliberadamente? -. A menudo la gente piense que Israel para establecer nuevos asentamientos o ampliar el tamaño de los ya existentes. Ambas afirmaciones son falsas.
  • Segundo punto: si la parte palestina quiere terminar con los asentamientos, eso debería ser un incentivo para alcanzar un acuerdo de paz cuanto más rápido mejor y así eliminar cuanto antes todos los asentamientos del nuevo territorio del Estado de Palestina. Tenga en cuenta que Israel - bajo el primer ministro israelí, Ariel Sharon, nada menos - demolió todos los asentamientos en la Franja de Gaza y en el norte de Samaria, lo que entre otras cosas es una señal de lo que podría obtenerse con un acuerdo de paz.
Sin embargo, la parte palestina nunca ha tenido prisa a la hora de llegar a un acuerdo. En teoría, cuando se queja de los asentamientos, la respuesta debería ser: "Entonces, ¿por qué no quieres comprometerte en un proceso de paz y deshacerse así de ellos, en lugar de que tengan que ser cada vez más grandes”?

Pero ustedes no tienen que pensar que esta es una idea nueva. Eso fue exactamente lo que el rey Hussein de Jordania le dijo al Consejo Nacional Palestino, el cuerpo "legislativo" de la OLP, el 22 de noviembre de 1984. Entonces les explicó:
"Los años pasan... Esta tierra santa y querida está siendo tragada todos los días... ¿Cuánto tiempo vamos a seguir prestando atención a esos de entre nosotros que nos dicen: Déjenlo para las generaciones futuras (el recuperar todo el territorio)  ¿Qué les hace creer que las circunstancias a las que se enfrenten las futuras generaciones serán más propicias, cuando el aplazamiento no supone más que dar más tiempo al enemigo?"
En otras palabras, su negativa a hacer la paz empeora las cosas:
"Por lo tanto, permitir al enemigo que aproveche el tiempo para cambiar la realidad en la tierra de Palestina en su favor... Hermanos y hermanas, ya que se verán perjudicados al máximo como resultado de la continuación de la situación actual..,. la experiencia nos ha enseñado que es necesario renunciar a la inmovilidad".
O, para decirlo sin rodeos, dejar de pelear y de utilizar la violencia, dejar de utilizar el maximalismo a la hora de pedir y dejar de esperar obtener una victoria total que borre a Israel del mapa, y así acabar con la idea de una solución de compromiso de dos estados.

Eso fue hace casi treinta años, y los mismos puntos que todavía se aplican.

En resumen:
- La mayor parte de lo que se dice acerca de los asentamientos en Occidente no es cierta. 
- Si usted realmente se siente tan herido por la existencia y crecimiento de los asentamientos, lo lógico es negociar y logra una paz rápidamente para deshacerse de ellos cuanto antes. 
- Si por el contrario no está tan interesado en una paz rápida y – por lo tanto – en deshacerse de ellos, entonces los asentamientos no son su verdadero problema, la existencia de Israel sí lo es. 
- Y eso significa que tenemos un problema sin solución, y alguien quizás vuelva a imprimir este artículo dentro de unos treinta años.

Labels: ,

0 Comments:

Post a Comment

<< Home